La catástrofe cambiaria

El sistema cambiario discriminatorio convierte a los venezolanos en despojos

El nuevo sistema cambiario impuesto hace dos semanas en nuestro país servirá de puente para trasladar la pobreza intelectual de algunos burócratas a la economía para convertirla en ruinas.

Imponer un sistema cambiario para Venezuela donde sólo algunos podrán disponer de dólares, según lo decida un grupito de burócratas desde una oficina fría, es algo realmente aberrante que no resiste ningún tipo de explicación. Que un grupo de burócratas decida quiénes son los que recibirán dólares, para qué, y cuánto, ofende la dignidad del resto de los venezolanos. El mensaje subliminal es que si no somos favorecidos por algún burócrata en la asignación de divisas, no somos seres capaces de producir. Si además, el nuevo sistema cambiario nos ofrece prisión y guillotina a todos los otros millones y millones de venezolanos que, aun no recibiendo divisas de los bárbaros burócratas del BCV ni de Cadivi, nos atrevamos a intercambiar divisas entre sí, estamos en presencia de uno de los actos más catastróficos de amputación de la dignidad y de la productividad humana que se haya vivido en la Historia. El actual sistema cambiario discriminatorio convierte a millones de venezolanos en despojos humanos.

¿CÓMO LLEGAMOS A ESTA INSENSATEZ CAMBIARIA ? No fue a propósito. Si recordamos, desde 1999 hasta el año 2003, en el país hubo total libertad cambiaria. Luego del paro de diciembre del 2002, el gobierno se vio en la obligación material de cerrar el mercado cambiario, y esos controles cambiarios fueron por necesidad y no por planificación. Una vez impuesto el primer control de cambio, el gobierno dejó un mercado permuta libre, y lo hizo poco significativo intentando otorgar sin discriminación dólares al tipo de cambio oficial. Tanto intentó otorgar divisas libremente al tipo de cambio oficial que no reconoció que había una inflación interna, ni vio la inmensa corrupción cambiaria de Cadivi I, e hizo aumentar las importaciones de USD 4,30 al año por persona en 1998 a USD 1.300 en el 2009. La gota que derrama el vaso es cuando bajan las entradas de divisas petroleras y en enero de 2010 el gobierno realizó, con su pesar, la inevitable devaluación a BsF 4,30/ USD con un permuta alrededor de BsF 6 / USD. Luego cuando observa que se dispara el dólar permuta a más de BsF 8 sin que el gobierno tenga divisas para bajarlo, es cuando deciden amputar.

¿CÓMO SALIMOS DE ESTE CRUEL SISTEMA CAMBIARIO? Si se mantienen amputados a los venezolanos impidiendo el uso de un insumo productivo como lo es el poder cambiar monedas entre naciones, la economía caerá en más de 30%. Los pocos que reciben dólares hoy, para importaciones de maletín o no, se harán inmensamente ricos y los millones de venezolanos restantes, productivos o no, inmensamente pobres. Al gobierno le quedan dos alternativas: 1.- Seguir engañándose con que la causa de la inflación, la desinversión y la devaluación son las empresas y los ciudadanos que las fundaron y las trabajan. O 2.- Admitir que la crisis también es culpa del propio gobierno, al no reconocer por años que una política monetaria expansiva, para no ser inflacionaria, necesita estimular a muchos ciudadanos a producir y, por lo tanto, a no discriminar entre ricos y pobres, ni blancos y negros, ni IV ni V República. ¿QUÉ HARÁ EL GOBIERNO?

El Universal
Alejandro Sucre

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